Cuando nuestro cristo de Pachacamilla salió del templo de las Nazarenas las sirenas no dejaron de sonar y el Himno Nacional se dejó escuchar por momentos. Se podía observar una bandera colombiana flameando. Como ya es costumbre, decenas de extranjeros participaban de la misa.
El Cardenal Cipriani durante la misa recordó a los santos peruanos y se hizo un pequeño homenaje a los policías. Recordando a aquellos que ya no se encuentran con nosotros.
Nuestro Cardenal no dejó de enfatizar el valor de la verdad: sin la verdad hay calumnias, dijo, y, pidió porque la fe se expandiera en todo el mundo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario